Majestuoso testimonio de un poder agostado

Majestuoso testimonio de un poder agostado

miércoles, 24 de julio de 2013

Siria: una clara "línea roja" israelí


Por Emilio Cárdenas |  Para LA NACION

La guerra civil siria continúa. Con todas sus terribles consecuencias: muerte, destrucción y horror, acumuladas ya a lo largo de dos años. En las últimas semanas, las fuerzas del gobierno de Assad, -que cuentan con el apoyo de los Quds iraníes y de las milicias de Hezbollah- parecen haber consolidado alguna ventaja, aprovechando las divisiones cada vez más profundas entre los insurgentes.
La comunidad internacional luce incapaz de detenerla. El propio Consejo de Seguridad -que en el esquema de seguridad colectiva es el responsable principal de asegurar la paz y seguridad internacionales- ha sido puesto de lado ante las amenazas de veto de Rusia y China respecto de cualquier medida que pretenda tomar con relación a esta crisis.

La amenaza de que, de pronto, la crisis se extienda más allá de las fronteras de Siria está vigente

El escenario, por cierto, sigue mostrando un conflicto cada vez más faccioso entre los musulmanes "sunnis" y los "shiitas". Por esto, la amenaza de que, de pronto, la crisis se extienda -cual reguero de pólvora- más allá de las fronteras de Siria está vigente. Particularmente respecto del Líbano. Hace pocos días, un atentado con explosivos -perpetrado en un barrio de Beirut donde la población que simpatiza con Hezbollah es mayoritaria- demostró que el involucramiento de las milicias de ese movimiento libanés en la contienda siria es un peligro para la paz interna del Líbano. El asesinato de un conocido periodista libanés defensor de los Assad, Darrar Jammo, ocurrido en el sur del Líbano, confirmó ese peligro.
La amenaza de que, de pronto, la crisis se extienda más allá de las fronteras de Siria está vigente
Israel, por su parte, parece haber trazado su propia "línea roja" que -cada vez que se cruza- genera reacciones militares quirúrgicas que no son oficialmente reconocidas por las autoridades israelíes. La secuencia de respuestas cada vez que esa "línea" se cruza es constante.
A fines de enero pasado, la aviación israelí destruyó, en Siria, un convoy de camiones que transportaba misiles antiaéreos SA-17, de fabricación rusa. Aparentemente estaban destinados a Hezbollah. Israel no hizo comentario alguno acerca de lo sucedido. Ni afirmativo, ni negativo. Nada.
En mayo, otros dos ataques sucesivos de la aviación israelí destruyeron -también en territorio sirio- depósitos de misiles Fateh-110, de fabricación iraní, capaces de alcanzar a Tel Aviv desde el sur del Líbano. Los ataques se consumaron con misiles disparados desde el interior de Israel. Nuevamente, la participación israelí en estos dos episodios no ha sido reconocida. Pero los ataques existieron.
Hace pocos días, el 5 de julio pasado, un nuevo ataque israelí desde el aire, destruyó un depósito de armas cerca del puerto sirio de Latakia. Así se eliminaron misiles Yakhont, provistos a Siria por Rusia. Se trata, en este caso, de proyectiles que pueden ser utilizados desde la costa, contra buques de guerra. Nuevamente, la razón parecería ser el riesgo que esos misiles sean utilizados por Hezbollah contra Israel, desde el sur del Líbano. Ya en julio de 2006, la referida milicia shiita disparó un misil de este tipo que dañó seriamente a un buque de guerra israelí. Nuevamente, después del ataque a Latakia, nadie en Israel admitió responsabilidad alguna.

Las operaciones atribuidas a la aviación israelí han sido exitosas. No obstante, tienen sus riesgos

La "línea roja" israelí respecto del conflicto sirio parece clara. No se permitirá que el movimiento Hezbollah reciba armas que puedan ser usadas contra Israel. Pese al silencio que sistemáticamente rodea a los distintos episodios aéreos relatados, esa parecería ser la inevitable conclusión.
Lo que sucede está en línea con lo acontecido el año pasado en Khartoum, la capital de Sudán, cuando una fábrica de armas fuera sorpresivamente destruida, también desde el aire. Y con la destrucción, en el 2007, de un reactor nuclear que (con apoyo de Corea del Norte) estaba en construcción en Siria.
Las operaciones atribuidas a la aviación israelí han sido exitosas. No obstante, tienen sus riesgos. ¿Qué pasaría si un avión israelí es derribado? La posibilidad de extensión del conflicto crecería. Aun así, la "línea roja" trazada por Israel respecto de la guerra civil siria, tiene sus razones y parece evidente.. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario