Majestuoso testimonio de un poder agostado
sábado, 2 de marzo de 2013
Chávez recibe quimioterapia, según el vicepresidente Maduro
El vicepresidente
de Venezuela revela que está bajo este tratamiento contra el cáncer y que le ve
"de buen ánimo".
El presidente de Venezuela, Hugo Chávez, está recibiendo quimioterapia,
según dio a conocer la noche del viernes el vicepresidente, Nicolás Maduro.
"¿Ustedes saben qué son los tratamientos complementarios, verdad? Bueno,
las quimioterapias que se aplican a los pacientes después de las
operaciones", señaló Maduro, quien ha agregado que ve al dirigente con
"buen ánimo".
"Tiene una fortaleza superior", continuó explicando el
vicepresidente a la salida de la misa de inauguración de una capilla contigua
al Hospital Militar de Caracas, centro médico en el que el presidente
venezolano ingresó el pasado 18 de febrero luego de 70 días de reclusión en
Cuba.
Chávez fue operado el 11 de diciembre en la capital de Cuba del cáncer
en la región pélvica que se le diagnosticó en junio de 2011. Desde el 10 de
diciembre no se le ve en público, ni en persona ni a través de algún medio, lo
que, junto a la información fragmentaria que difunde su gobierno, ha dado lugar
a una serie de versiones sobre el verdadero estado de salud del mandatario, así
como sobre su paradero.
Las palabras de Maduro parecieron responder a los rumores sobre un agravamiento
en la condición de Chávez, que estaría entre la vida y la muerte. Maduro
atribuyó a una operación lanzada desde Miami por “bandas mafiosa” en las que
incluyó a los ex funcionarios del Departamento de Estado norteamericano, Otto
Reich , Roger Noriega y John Negroponte.
Chávez habría escogido volver a Caracas para enfrentar esta nueva ronda
de quimioterapia, “más intensa y más dura”, de acuerdo a Maduro. El
vicepresidente venezolano, ungido por el propio Chávez como su sucesor en
alocución de radio y televisión el pasado 8 de diciembre, en previsión de un
posible desenlace fatal de la intervención quirúrgica que se le practicaría en
Cuba, exigió a la oposición miramientos hacia la situación del presidente:
““Cuando uno está enfermo o uno tiene un padre uno respeta su cuidado (…) cosa
que esta derecha maltrecha, perversa e inhumana no ha hecho ni un solo día”.
Fue el cierre de una jornada sembrada de rumores, no sólo referidos a la
salud presidencial. Corrieron en redes sociales versiones acerca de saqueos en
diferentes zonas de la ciudad capital. Un despliegue de vehículos blindados en
el estado Zulia, al occidente del país, encendió los temores a un
pronunciamiento militar. La presencia de una columna de tanquetas correspondía,
de acuerdo a la información oficial, a unos ejercicios programados con
anterioridad.
El divorcio político ahoga a Estados Unidos
La falta de acuerdo
sobre los presupuestos se traduce en un ajuste drástico.
Obama anuncia que
costará hasta 750.000 empleos y un punto de crecimiento.
Que la última reunión mantenida por la mañana para evitarlo durase menos
de una hora dio la pauta de lo que estaba por llegar cuando el presidente
compareció luego ante la prensa para calificar de “tontos” y “arbitrarios” los
recortes automáticos al presupuesto federal –conocidos como ‘secuestro’– por un
total de 85.000 millones de dólares que debían de entrar en vigor a lo largo
del día de hoy ante la incapacidad de un acuerdo entre la Casa Blanca y los
legisladores de ambos partidos en el Congreso.
Desde el podio de la sala de prensa de la Casa Blanca, un combativo
Barack Obama ha llegado a decir que él no era “un dictador”, sino “el
presidente”, ante la insistencia de algunos reporteros de por qué no había
hecho más –como por ejemplo, “encerrar a los líderes del Congreso en una sala
hasta que hubiera acuerdo”, en boca de la periodista de CNN–. “Yo no puedo
ordenar lo que hay que hacer, es un problema de responsabilidad de cada uno”,
ha explicado Obama informando que no iba a dictar al servicio secreto que bloquease
la puerta de salida a nadie. “No puedo forzar al Congreso a que haga lo
correcto”, ha proseguido Obama bromeando que no tenía el poder mental del Jedi.
El presidente ha culpado a los republicanos y así quedaba cerrado el
cruce de acusaciones que había abierto minutos antes el líder de la Cámara, el
republicano John Boehner –la culpa es del presidente por “insistir en que el
aumento de los impuestos a las rentas más altas sea parte del acuerdo”-.
Utilizando su habitual ‘déjenme ser claro’, Obama ha asegurado que nada de lo
que estaba pasando era “necesario”. “Ocurre lo que ocurre porque así lo han
decidido los republicanos del Congreso. No deberíamos de estar haciendo
recortes tontos y arbitrarios”.
Creado en julio de 2011 por políticos desesperados en Washington durante
la negociación del techo de la deuda de aquel verano –de aquellos polvos vienen
estos lodos- para obligarse a encontrar una solución inteligente a los recortes
–¡¿quién pensaba que se llegaría hasta aquí sin acuerdo?!–, el famoso ‘secuestro’
se convirtió ayer en parte de la ley del país hasta el 27 de marzo, día en que
el Gobierno se queda sin fondos y podría entrar en bancarrota –otra fecha que
se puso a última hora en febrero dilatando una crisis que agota a todo el mundo
y a la que no se ve final–.
“No podemos seguir gestionando el país mes a mes, crisis a crisis,
debemos solucionar el tema del presupuesto para los próximos meses y los
próximos años”, ha dicho el presidente. “Con esto no gana nadie”, ha proseguido
Obama en su comparecencia. “Esto es una pérdida para el pueblo norteamericano”.
La letanía ha seguido y seguido y no ha parado hasta que el presidente decidió
que había que bajar una nota el catastrofismo y ha anunciado que lo que estaba
por venir no era “el apocalipsis”, como ha dicho “alguna gente”. “Es tonto y va
a hacer daño. Va a dañar a individuos en particular y a la economía en
general”, ha informado el mandatario, que ha advertido de que la falta de
acuerdo supondrá la destrucción de 750.000 empleos y costará un punto al
crecimiento del país. “Puede que personas como Michael Bloomberg no noten la
reducción de fondos, pero este fin de semana, cuando se marchen los
legisladores del Congreso, el personal de seguridad y de limpieza sí van a
empezar a sufrirla". Boehner ha tomado un avión tras finalizar la reunión
de la mañana rumbo a su casa en Ohio y una vez más quedaba escenificada la
inmensa brecha entre republicanos y demócratas a la hora de conjugar el modelo
de sociedad que desean para EEUU.
El principal escollo de las negociaciones está en que los republicanos
consideran que el gasto del Gobierno es excesivo y hay que recortarlo más,
mientras los demócratas persiguen una reforma fiscal para aumentar los ingresos
del Estado a la que los conservadores se oponen. “La discusión sobre los
ingresos, en mi opinión, ha terminado. Se trata de asumir el problema del
gasto”, explicó a los periodistas Boehner, al término de la reunión de la
mañana con Obama.
Cansado de la ingobernabilidad a la que el manejo partidista de los
presupuestos del país a conducido el país, Obama ha dejado saber que “la
reducción del déficit es parte importante de nuestra agenda, pero no la única”.
El presidente ha prometido que “el estancamiento político” en torno al tema
presupuestario no va a impedir que siga trabajando con los republicanos en
otras áreas, como el control de armas y la reforma migratoria.
Por primera vez desde la anterior crisis de final de año, el presidente
se reunía esta mañana con los cuatro líderes del Congreso –Boehner; el
líder de la mayoría en el Senado, Harry Reid; la líder de la minoría en la
Cámara, Nancy Pelosi; y Mitch McConnell, líder de la minoría en el Senado-.
Pero el solo hecho de que el encuentro se programase para el mismo día en que
los recortes debían de entrar en vigor –y con la mitad del Congreso ya de fin
de semana- no podía hablar más claro de lo que iba a pasar. Adelante
‘secuestro’, pase hasta el fondo, nadie lo quiere y sin embargo aquí está.
viernes, 1 de marzo de 2013
¿Una ‘primavera vaticana’?
La Iglesia necesita un Papa abierto a la modernidad y que defienda la
libertad.
Un grupo de cardenales valientes debe enfrentarse a los sectores más
inflexibles de la jerarquía y exigir un candidato con ese perfil.
La primavera
árabe sacudió toda
una serie de regímenes autoritarios. Ahora que ha dimitido el papa Benedicto
XVI, ¿será posible que ocurra algo similar en la Iglesia católica, una primavera
vaticana?
Por
supuesto, el sistema de la Iglesia católica, más que a Túnez o Egipto, se
parece a una monarquía absoluta como Arabia Saudí. En ambos casos, no se han
hecho auténticas reformas, sino concesiones sin importancia. En ambos casos, se
invoca la tradición para oponerse a la reforma. En Arabia Saudí, la tradición
solo se remonta a 200 años atrás; en el caso del papado, a 20 siglos.
Ahora
bien, ¿es cierta esa tradición? En realidad, la Iglesia vivió durante un
milenio sin un papado de tipo monárquico absolutista como el que conocemos.
Fue a
partir del siglo XI cuando una “revolución desde arriba”, la “reforma
gregoriana” iniciada por el papa Gregorio VII, nos legó las tres
características históricas del sistema de Roma: un papado centralista y
absolutista, un clericalismo forzoso y la obligación del celibato para los
sacerdotes y otros clérigos seglares.
Los
esfuerzos de los concilios reformistas del siglo XV, los reformadores del siglo
XVI, la Ilustración francesa en los siglos XVII y XVIII y el liberalismo del
siglo XIX tuvieron éxito solo en parte. Incluso el Concilio Vaticano II, de
1962 a 1965, a pesar de abordar muchas preocupaciones de los reformadores y los
críticos modernos, se vio obstaculizado por la curia, el órgano rector de la
Iglesia, y no logró poner en práctica más que parte de los cambios exigidos.
Hoy, la
curia, que también es un producto del siglo XI, sigue siendo el principal
obstáculo para cualquier reforma de fondo de la Iglesia católica, cualquier
acuerdo ecuménico con las demás iglesias cristianas y religiones mundiales y
cualquier actitud crítica y constructiva frente al mundo moderno.
Con los
dos últimos papas, Juan Pablo II y Benedicto XVI, se ha producido un fatal
regreso a los viejos hábitos monárquicos de la Iglesia.
En 2005,
en una de sus escasas muestras de audacia, Benedicto mantuvo una amigable
conversación de cuatro horas conmigo en su residencia de verano, en
Castelgandolfo, cerca de Roma. Yo había sido colega suyo en la Universidad de
Tubinga y también su crítico más feroz. Durante 22 años, después de que
criticara la infalibilidad del Papa y me retirasen la autorización eclesiástica
para dar clase, no habíamos tenido el menor contacto privado.
Antes del
encuentro, decidimos dejar de lado nuestras diferencias y hablar de temas sobre
los que podíamos estar de acuerdo: la relación positiva entre la fe cristiana y
la ciencia, el diálogo entre religiones y civilizaciones y el consenso ético
entre fes e ideologías.
Para mí,
y para todo el mundo católico, la entrevista fue una señal de esperanza. Pero,
por desgracia, el pontificado de Benedicto estuvo marcado por crisis y malas
decisiones. Logró irritar a las iglesias protestantes, los judíos, los
musulmanes, los indios de Latinoamérica, las mujeres, los teólogos reformistas
y todos los católicos partidarios de las reformas.
Los
mayores escándalos de su papado son conocidos: para empezar, el hecho de que
Benedicto reconociera a la archiconservadora Sociedad de San Pío X del
arzobispo Marcel Lefebvre, que se opone de manera rotunda al Concilio Vaticano
II, y a un personaje que niega el Holocausto, el obispo Richard Williamson.
Luego
estuvo la inmensa ola de abusos sexuales a menores por parte de sacerdotes, que
el Papa ayudó en gran parte a encubrir cuando era el cardenal Joseph Ratzinger.
Y después el caso Vatileaks, que reveló un espantoso número de
intrigas, luchas de poder, corrupción y deslices sexuales en la curia, y que
parece ser una de las principales razones por las que Benedicto ha decidido
abandonar.
Esta
primera dimisión de un papa en casi 700 años deja al descubierto la crisis
fundamental que se cierne sobre una Iglesia anquilosada. Y ahora, todo el mundo
se pregunta: ¿Será posible que el próximo Papa, a pesar de todo, inaugure una
nueva primavera para la Iglesia católica? No se pueden ignorar las desesperadas
necesidades de la Iglesia. Existe una desastrosa escasez de sacerdotes, en
Europa, Latinoamérica y África. Son muchísimas las personas que han dejado la
Iglesia o han emprendido una “emigración interna”, sobre todo en los países
industrializados. Ha habido una inequívoca pérdida de respeto hacia obispos y
sacerdotes, el distanciamiento, en particular, de las mujeres jóvenes, y la
incapacidad de incorporar a los jóvenes a la Iglesia.
No
debemos dejarnos engañar por el poder mediático de los grandes acontecimientos
papales de masas ni por los aplausos enloquecidos de los grupos juveniles
católicos. Detrás de la fachada, la casa está viniéndose abajo.
En esta
dramática situación, la Iglesia necesita un Papa que no viva desde el punto de
vista intelectual en la Edad Media, que no defienda ningún tipo de teología,
liturgia ni constitución eclesiástica propias de la época medieval. Necesita un
Papa abierto a las preocupaciones de la reforma, a la modernidad. Un Papa que
defienda la libertad de la Iglesia en el mundo no solo mediante sermones sino
luchando con hechos y palabras por la libertad y los derechos humanos dentro de
la Iglesia, por los teólogos, por las mujeres, por todos los católicos que
desean decir la verdad abiertamente. Un Papa que no siga obligando a los
obispos a obedecer una línea oficial reaccionaria, que ponga en práctica una
democracia apropiada dentro de la Iglesia, construida según el modelo del
cristianismo primitivo. Un Papa que no se deje influir por ningún otro “Papa en
la sombra” del Vaticano como Benedicto y sus leales seguidores.
La
procedencia del nuevo Papa no debería ser un factor crucial. El Colegio
Cardenalicio debe elegir al mejor, sin más. Por desgracia, desde la época del
papa Juan Pablo II, se emplea un cuestionario para hacer que todos los obispos
sigan la doctrina oficial de Roma en los asuntos polémicos, un proceso sellado
por el voto de obediencia incondicional al Papa. Por eso, hasta ahora, no ha
habido disidentes públicos entre los obispos.
Sin
embargo, la jerarquía católica ha recibido advertencias sobre la brecha
existente entre ella y los seglares en asuntos importantes relacionados con
posibles reformas. Una encuesta reciente en Alemania muestra que el 85% de los
católicos son partidarios de dejar que los curas se casen, el 79%, de que los
divorciados puedan volver a casarse por la Iglesia, y el 75%, de que las
mujeres puedan ordenarse. Probablemente, las cifras serían similares en muchos
otros países.
¿Será
posible que tengamos un cardenal o un obispo que no esté dispuesto a seguir por
la misma senda trillada de siempre? ¿Alguien que sepa lo profunda que es la
crisis de la Iglesia y conozca vías para salir de ella?
Estas
preguntas deben discutirse abiertamente, antes del cónclave y durante él, sin
que nadie amordace a los cardenales, como se hizo en 2005 para que se atuvieran
a las directrices.
Soy el
último teólogo en activo de los que participó en el Concilio Vaticano II (junto
con Benedicto) y, como tal, me pregunto si no será posible que haya al comienzo
del cónclave, igual que hubo al comienzo del Concilio, un grupo de cardenales
valientes que se enfrenten a los miembros más inflexibles de la jerarquía
católica y exijan un candidato dispuesto a aventurarse en nuevas direcciones.
¿Tal vez a través de un nuevo concilio reformista o, mejor aún, una asamblea
representativa de obispos, sacerdotes y seglares?
Si el
próximo cónclave elige a un Papa que vuelva a lo de siempre, la Iglesia nunca
experimentará una nueva primavera, sino que caerá en una edad de hielo y
correrá el peligro de encogerse hasta convertirse en una secta cada vez más
irrelevante.
Hans
Küng es
catedrático emérito de Teología Ecuménica en la Universidad de Tubinga y autor
del libro de próxima publicación ¿Puede salvarse la Iglesia?
©2013 The New York Times. Distribuido por The New York Times Syndicate.
El desempleo en Europa llegó al récord de 11,9%
Son casi 19 millones de personas que están sin
trabajo; el promedio en los 17 países que integran la Unión Europea no tiene
antecedentes.
un promedio
del orden del 11,9 por ciento. Foto: Comisión Europea (Facebook)
La tasa de desempleo en las 17 naciones de la Unión
Europea que utilizan el euro como divisa común subió a un récord de 11,9%, pero
la inflación cayó a su nivel más bajo en dos años y medio, mostraron el viernes
cifras oficiales.
Eurostat , la
oficina de estadísticas de la UE, dijo que casi 19 millones de personas están
desempleadas en la zona del euro después de un incremento de aproximadamente
200.000 en enero. Eso hizo que la tasa subiera del 11,8% de enero, la marca
previa.
El alza no
fue una sorpresa dado que la economía de la eurozona en su conjunto está en
recesión y se espera que se siga contrayendo en la primera mitad de 2013.
La tasa general, sin embargo, enmascara enormes
divergencias. Mientras que Grecia y España languidecen bajo el peso de un
masivo desempleo superior a 25%, economías como Alemania están operando con
niveles relativamente bajos de alrededor de 5%.
Empero, esos europeos incapaces de hallar empleo
podrían encontrar algo de alivio si la caída en la inflación motiva que el
Banco Central Europeo reduzca nuevamente las tasas de interés.
La agencia
de estadísticas reportó que los precios al
consumidor subieron 1,8% en febrero, abajo del alza de 2% de
enero y del 1,9% pronosticado.
Además, la inflación bajo de la meta de 2% exigida
por el Banco Central Europeo (ECB por sus iniciales en inglés) por primera vez
desde noviembre de 2010 y a su nivel más bajo desde agosto de ese mismo año.
Analistas dijeron que la caída podría llevar al ECB
a recortar su tasa de referencia del récord 0,75% tan pronto como la semana
próxima. Una disminución en las tasas de interés haría más barato a familias y
negocios obtener préstamos, gastar e invertir, generando consecuentemente
crecimiento en la economía.
``La
ausencia de presiones de precios debería dejar abiertas las opciones de
política del ECB'', dijo Jennifer McKeown, economista de Capital Economics.
``Pensamos que el banco podría discutir un recorte a la tasa de interés un
otras políticas no convencionales en su reunión de la próxima semana'', agregó..
jueves, 28 de febrero de 2013
Argentina dice que no pagará a los acreedores que la han demandado
El caso
podría provocar la segunda suspensión de pagos del país sudamericano en 12 años.
Argentina, los
acreedores que litigan contra ella y otras partes afectadas por el conflicto
entre ambos expusieron este miércoles sus argumentos en una audiencia clave en
el Tribunal de Apelaciones del Segundo Circuito de Nueva York. En
un caso que puede provocar la segunda suspensión de pagos del país sudamericano
en 12 años y también puede sentar un precedente para las reestructuraciones de
deuda de otros países, el Gobierno de Cristina Fernández de
Kirchner dejó en claro
que no planea aceptar una ratificación del fallo del juez de primera instancia
de Nueva York, Thomas Griesa, que bloquearía el pago de la deuda reestructurada
en 2005 y 2010 hasta que no se pagase el 100% a un grupo de los bonistas que
rechazaron en esos años canjear los títulos públicos que permanecen impagos
desde 2001 por otros con quitas de entre la mitad y tres cuartos de su valor.
En una
sesión que duró dos horas, tres magistrados del tribunal escucharon los
argumentos de Argentina, los acreedores litigantes, aquellos que aceptaron las
reestructuraciones con fuertes quitas (los canjes gozaron de una aceptación del
92%) y el banco que actúa como vehículo para los pagos a estos, Bank of New
York Mellon. En una sala abarrotada por periodistas y partes en conflicto,
incluido el vicepresidente de Argentina, Amado Boudou, y su ministro de
Economía, Hernán Lorenzino, que viajaron especialmente para la audiencia, el
abogado estadounidense del país sudamericano, Johnathan Blackman, ratificó que
Buenos Aires no pagará el 100% de lo demandado y podría terminar ignorando una
nueva disposición judicial que así lo dispusiera. “No obedeceríamos
voluntariamente una orden así", dijo Blackman. Es decir, los demandantes
deberían seguir buscando activos para embargar, algo que ha resultado imposible
en los últimos 12 años porque los bienes de Argentina en el exterior, como
embajadas o buques militares, suelen estar resguardados por la inmunidad
soberana.
Blackman
argumentó que obligar a Argentina a pagar el 100% de lo demandado afectaría su
soberanía, su economía y futuros procesos de canjes de deudas de otros países,
dado que incentivaría los rechazos de las propuestas de quitas y fomentaría la
opción de litigar. Este argumento ha llevado a que el Gobierno de EE UU
interviniera en el juicio para dar su opinión contra el bloqueo del pago de los
bonos argentinos reestructurados, dado que una decisión así perjudicaría a Nueva
York como plaza de emisión de deuda soberana de otros países y hasta podría
incidir en eventuales canjes en la Europa actualmente atribulada.
Argentina,
en cambio, propone que los acreedores acepten un tercer canje de deuda, aquello
que han rechazado hasta ahora. "La fórmula (de pago) que planteamos, que
creemos que es la única que verdaderamente ofrece un trato igualitario, es que
se tomen como referencia los bonos reestructurados", propuso Blackman.
Trato
igualitario es lo que exigen los demandantes a partir de una cláusula de los
títulos impagos desde 2001. Sostienen que si se les pagan a los que canjearon
esos bonos también ellos deben ser resarcidos, aunque sin la quita, dado que la
rechazaron. La demanda está encabezada por dos fondos norteamericanos apodados
buitres, Elliot Management y Aurelius Capital, porque se dedican a comprar
deuda de países y empresas cuando caen en suspensión de pagos y su precio está
por los suelos para después reclamar el 100% de su valor original en los
tribunales. Elliot, Aurelius y unos 13 pequeños inversores argentinos que, a
diferencia de los buitres, compraron los títulos antes de la suspensión de
pagos exigen el pago de 1.400 millones de dólares (1.066 millones de euros).
Si se
confirma el fallo de Griesa a favor de los litigantes, Argentina, al rechazar
la orden de pagarles, caería en lo que se considera una suspensión de pagos
técnicos por 24.000 millones de dólares (18.271 millones de euros), que es la
cantidad de títulos reestructurados bajo legislación extranjera, ya sea de
Nueva York, Londres o Japón. Se llama técnica porque no sería Argentina la que
declararía voluntariamente una suspensión de pagos, sobre todo cuando su deuda
pública neta (descontado lo que le debe a su Banco Central, la Seguridad Social
y otros organismos públicos) es de apenas el 19% del PIB.
"Argentina
puede pagar, no hay dudas sobre eso", afirmó Ted Olson, abogado de
Elliott, en la audiencia de este miércoles. También recordó palabras de
Fernández del año pasado: “A los fondos buitres, ni un dólar”. Claro que
fuentes oficiales de Buenos Aires explican que si los litigantes aceptasen que
se les abonase con quita dejarían de ser tachados de buitres.
Un grupo
de acreedores de bonos reestructurados pidió a su vez que no se afectaran sus
derechos de propiedad y que, por tanto, no se les bloquearan los pagos que debe
hacerle Argentina cada año en concepto de renta. También el Bank of New York
Mellon reclamó que ningún intermediario de los desembolsos de deuda canjeada
fueran considerados cómplices en caso de seguir cumpliendo con sus funciones,
en contraposición a lo que había sentenciado el juez Griesa en octubre pasado.
Una de
las magistradas, Reena Raggi, dijo este miércoles que el papel de su tribunal
radicaba en hacer cumplir los contratos y "no volver a escribirlos",
en una declaración negativa hacia la postura argentina. También consideró que
"difícilmente parece apropiado" que se incumpliera una orden judicial
para que Argentina pagase a los litigantes si se sospechara que esto llevaría
al país a suspender pagos con terceros.
El fallo
del Tribunal de Apelaciones quizá se conozca entre finales de marzo y
principios de abril. En caso de resultar favorable a los demandantes, el
ministro Lorenzino anunció que pedirá su revisión por un plenario de los 13
magistrados del tribunal.
¿Qué se dirime en la causa judicial en EE UU sobre la deuda
argentina?
En su crisis de 2001, Argentina suspendió pagos de una deuda por
82.000 millones de dólares. En 2005 y 2010 celebró canjes de deuda en los que
la mayoría de los acreedores aceptó cambiar sus títulos originales por otros
con una quita de entre el 50% y el 75%. Se reestructuró el 92% de lo adeudado.
Pero otros inversores que tienen el 8% de las acreencias impagas rechazaron los
canjes y están litigando para recuperar el 100% del valor original de los
bonos. Casi dos tercios de los demandantes tienen títulos emitidos con
legislación del estado de Nueva York, y la mitad de ellos, a su vez, se
encuentra en manos de los fondos buitres.
¿Qué son los fondos buitres?
Son los dueños de aproximadamente el 27% de los bonos impagos
desde 2001, que en total suman demandas por más de 11.000 millones de dólares.
Se trata de fondos de inversión con residencia en paraísos fiscales pero
pertenecientes a inversores norteamericanos, como el asesor republicano Paul
Singer, que compran deuda de países y empresas en quiebra, cuando su precio se
encuentra por los suelos, para después litigar por el 100% del valor original.
Nunca aceptan canjes de deuda que supongan quitas sino que esperan que los
tribunales les den la razón. Como modo de presión, suelen pedir embargos de los
bienes del endeudado cuando y donde puedan. Elliot Management, de Singer, y
Aurelius son los que encabezan la demanda que está definiéndose en la
actualidad en Nueva York. Elliot fue el que logró el año pasado el embargo del
buque escuela de Argentina, la fragata Libertad, en Ghana, aunque la medida
judicial duró dos meses hasta que el Tribunal Internacional del Mar le recordó
al pais africano que los bienes militares de los países gozan de inmunidad
soberana.
¿Qué reclaman los fondos buitres a Argentina?
Elliot, Aurelius y 13 pequeños inversores de Argentina reclaman
en el juicio actual que se les paguen 1.400 millones de dólares.
¿Existen otras demandas de acreedores contra Buenos Aires?
Sí. Los buitres demandan en total 3.000 millones de
dólares. Además, el 36% de la deuda impaga está en manos de tenedores de bonos
en euros, muchos de los cuales son ahorradores italianos que fracasaron en sus
demandas en la justicia de su país y ahora intentan recuperar lo invertido con
un juicio en el Centro Internacional de Arreglo de Diferencias Relativas a
Inversiones (CIADI), el tribunal arbitral del Banco Mundial, el mismo al que ha
recurrido Repsol por la nacionalización del 51% de YPF. El 33% se encuentra en
poder de tenedores de títulos en dólares que no son buitressino inversiones
institucionales de EE UU, como universidades o fondos de pensiones, y
ahorradores argentinos que los compraron sin la intención de recurrir a los
tribunales sino como supuesta inversión rentable. Este grupo litiga en Nueva
York e incluye a los 13 demandantes que acompañan a Elliot y Aurelius. Por
último, un 2% de lo debido son bonos en pesos, cuyos dueños, ahorradores
argentinos, litigan sin suerte en los tribunales de su país.
¿Cuanto dinero ganarían los litigantes en caso de vencer en la
justicia?
Elliot, Aurelius y los 13 ahorradores habían desembolsado nada
más que 70 millones de dólares para comprar la deuda, sobre todo, poco antes de
la suspensión de pagos de diciembre de 2001. Ahora exigen 1.330 millones más.
Es decir, 20 veces más.
¿Cómo les ha ido hasta ahora a los demandantes?
Cuando era presidente de Argentina, Néstor Kirchner (2003-2007)
planteó un canje de deuda con fuerte quita con el argumento de que su país
debía ajustarla para adecuarla a sus posibilidades reales de pago y para
posibilitar la recuperación de una economía entonces deprimida y sin opciones
de volver a cumplir con sus obligaciones. Desde entonces, Buenos Aires siempre
rechazó los fallos en el extranjero, sobre todo en EE UU, que le exigían pagar
lo adeudado. Por normas internacionales, los demandantes no pueden embargar
activos diplomáticos y militares resguardados por la inmunidad soberana.
Además, Argentina adoptó medidas para proteger otros bienes, como las reservas
de su Banco Central, que fueron depositadas en un lugar intocable, el Banco
Internacional de Pagos (banco central de los bancos centrales), con sede en
Basilea (Suiza), y sus presidentes, primero Kirchner y después, su esposa,
Cristina Fernández, dejaron de volar al exterior en el avión oficial. La fragata
Libertad esquivaba los puertos de países donde se hubiesen radicado litigios
contra Argentina hasta que fue sorprendida en 2012 por Ghana. Ante el fracaso
de la estrategia de embargos, los litigantes esgrimieron el argumento de que
los bonos impagos de 2001 contenían una cláusula de trato igualitario a los
acreedores y sostuvieron que pagarles a los que aceptaron los canjes y no a
ellos resultaba injusto. El juez de primera instancia de Nueva York, Thomas
Griesa, les dio la razón en febrero de 2012. El Tribunal de Apelaciones lo
ratificó en octubre y le pidió a Griesa que propusiera una fórmula de ejecución
del tratamiento igualitario. Griesa entonces determinó el bloqueo a los
inversores en títulos reestructurados hasta que se les abonara a los demandantes,
posición que ahora está revisando el tribunal superior a él.
¿Qué pide Argentina en el juicio?
Primero, que los 13 magistrados del tribunal revisen la decisión
de tres de ellos de octubre pasado que confirmaba el uso de la cláusula de
tratamiento igualitario a favor de los litigantes. Argentina se rehúsa a
aceptar esa norma porque sostiene que solo debe pagarles a los que aceptaron
los canjes porque si no, resultaría injusto para estos últimos. Además,
argumenta que no se la puede obligar a pagar de determinada manera porque es un
estado soberano que no puede someterse a un tribunal de EE UU. Argentina, que
por voluntad propia emitió en los 90 y principios de los 2000 deuda bajo la
legislación de Nueva York, ahora alega que acepta la ley de este estado dentro
de los parámetros del Acta de Inmunidad de Soberanía Extranjera de EE UU, es
decir, solo para sus activos comerciales en territorio norteamericano. Pero
este miércoles el Tribunal de Apelaciones rechazó la revisión plenaria de su
decisión de octubre. Además, Argentina pide al Tribunal de Apelaciones que
rechace la fórmula de pago establecida por Griesa y le ofrece la reapertura del
canje de deuda, es decir, abonarles con quita a los litigantes. Argumenta que
el fallo de Griesa vulneraría su soberanía, su economía y futuros procesos de
reestructuraciones de deuda de otros países, dado que incentivaría el litigio
en lugar de su aceptación.
¿Qué argumentan los fondos buitres?
Sostienen que Argentina debe cumplir con su compromiso de pagar
su deuda contraída antes de la suspensión de pagos de 2011 y que un fallo
judicial que no fuese en ese sentido dañaría la cadena de pagos de la economía
mundial. Argumentan que Argentina tiene suficientes reservas en el Banco
Central para pagarles, pero no quiere hacerlo. También le echan la culpa a
Buenos Aires por un eventual impago a los acreedores de deuda reestructurada
porque aseguran que puede abonarles a ambos. Quieren que el tribunal ratifique
que el Gobierno de Fernández debe pagarles de una sola vez y en efectivo, y no
en cuotas o en bonos.
¿Cuándo se conocerá el fallo?
Entre marzo y abril.
¿Qué hará Argentina si se ratifica la sentencia desfavorable?
Pedirá que los 13 magistrados del tribunal revisen los fallos de
Griesa y de tres de ellos a favor de bloquear los pagos de la deuda
reestructurada hasta que se salde el pasivo impago. Si esa apelación no
prospera, entonces recurrirá al Tribunal Supremo de EE UU, aunque no está claro
si éste aceptara intervenir en el caso.
¿Por qué Argentina puede entrar en suspensión de pagos?
Argentina tiene una deuda pública neta (la bruta menos la que
está en manos de su Banco Central, su Seguridad Social y otros organismos
públicos propios) del 19% del PIB. Resulta muy baja comparada con países
europeos, con otros latinoamericanos y con los niveles históricos de Argentina.
Pero si se ratifica la sentencia de Griesa y como Argentina se niega a pagar a
los demandantes el 100% de lo que exigen, se bloquearían los desembolsos del
país sudamericano hacia tenedores de bonos de legislación extranjera por 24.000
millones de dólares. Buenos Aires argumenta que en ese caso, a la demanda
actual del grupo de acreedores que pide 1.400 millones, se sumarían juicios por
otros 43.000 millones tanto de otros tenedores de títulos impagos como de los
propietarios de bonos reestructurados que estarían impedidos de cobrar lo suyo.
Se trataría de una suma superior a la de las reservas internacionales del Banco
Central de Argentina.
¿Cómo puede afectar a Argentina un fallo desfavorable?
Puede elevar aún más la prima de riesgo de Argentina. Este país
no recurre a los mercados de deuda para financiarse, pero sí lo hacen sus
provincias y empresas públicas, como YPF, y privadas, por lo que la subida de
la prima encarecería el crédito y, por tanto, afectaría la actividad económica
y la inversión después de un 2012 de fuerte desaceleración del alto crecimiento
de los años anteriores.
¿Qué otras partes están afectadas por el juicio?
Por un lado, los acreedores de deuda reestructurada, que aseguran
que se vulneraría su derecho de propiedad en caso de bloquearse los pagos de
Argentina. Un colectivo llamado Grupo de Acreedores del Canje ha presentado sus
argumentos en el juicio como parte afectada. Otro que también ha tenido la
oportunidad de defenderse es el Bank of New York Mellon, agente fiduciario del
pago a esos acreedores, al que el juez Griesa consideró que sería cómplice de
Argentina en caso de abonarles lo adeudado antes de que los litigantes
recibiesen lo suyo. Hay una lista de otras entidades intermediarias de la
transferencia y liquidación del dinero a los dueños del pasivo en situación
regular que también se sienten amenazados por la sentencia de Griesa.
¿Quiénes son los magistrados que definirán el pleito?
Dos republicanos, Daniels Barrington Parker y Reena Raggi, y una
demócrata, Rosemary Pooler
¿Qué otros participantes actuaron en el proceso judicial?
Entre diciembre y febrero, los magistrados escucharon a los
llamadosamigos del tribunal para
que opinaran sobre la cuestión. En contra del fallo de Griesa, y en la práctica
a favor de Argentina, se presentaron el Gobierno del demócrata Barack Obama,
que alegó que debe respetarse el derecho de un país a reestructurar su deuda;
la Reserva Federal de Nueva York; una exsubdirectora gerente del Fondo
Monetario Internacional (FMI), Anne Krueger, otrora crítica de los Kirchner
pero que ahora argumenta que una sentencia en contra de Buenos Aires también
perjudicaría canjes de deuda de otros países y además que la imposibilidad de
las reestructuraciones exitosas fomentaría el estancamiento económico; un
economista y diputado de la oposición argentina, Alfonso Prat-Gay, que sostiene
que ni la quita de la deuda argentina fue tan grande como reivindican el
kirchnerismo y numerosos analistas ni el Banco Central de su país dispone de
tantas reservas porque si no, no habría tantas restricciones cambiarias y
comerciales para evitar la salida de divisas; y acreedores norteamericanos y
argentinos de deuda en situación regular. A favor de los demandantes se expresaron
abogados y profesores universitarios.
.
El futuro del microchip está en el carbono
Qué son los nanotubos
de carbono, la tecnología que espera superar los desafíos que enfrentan los
actuales microprocesadores, con restricciones físicas ante diseños cada vez más
pequeños.
SAN FRANCISCO.- En la próxima década se espera que
los circuitos que contienen los chips de computadora, con base de silicio, se
fabriquen tan pequeños como sea físicamente posible, lo que ha provocado una
búsqueda de materiales alternativos para tomar su lugar.
Algunos investigadores tienen grandes expectativas
para los nanotubos de carbono y, el lunes, un grupo de investigadores de
Stanford puso a prueba, con éxito, un simple circuito microelectrónico,
integrado por 44 transistores que están fabricados enteramente con fibras
filiformes.
El desarrollo, presentado como un trabajo escrito y
también como una demostración práctica en una conferencia técnica que se llevó
a cabo en San Francisco, es la prueba más sorprendente de que los nanotubos de
carbono pueden llegar a ser el material del futuro una vez que los actuales
chips de silicio alcancen sus límites físicos fundamentales.
IBM, que es uno de los mayores defensores
de los nanotubos para aplicaciones microelectrónicas, ha dejado
en claro su deseo de que la tecnología de los nanotubos de carbono esté lista
dentro de una década, momento en el que se espera que los semiconductores se
reduzcan a las dimensiones mínimas de sólo 5 nanómetros. Pero, hasta ahora, los
investigadores de las universidades y los fabricantes de chips sólo han tenido
éxito en la fabricación de dispositivos individuales, como transistores,
construidos a partir de nanotubos de carbono.
El desarrollo de Stanford marcó la primera creación
y demostración pública de un circuito completo en funcionamiento, lo que
sugiere que el material puede efectivamente cumplir con su promesa.
El silicio, un elemento abundante y natural, que
funciona como conductor y aislante, ya ha durado décadas más de lo que esperaban
los ingenieros informáticos, debido a que se han perfeccionado generaciones de
transistores cada vez más pequeños. Este elemento se utiliza en la industria
del chip para computadoras con el propósito de grabar circuitos mucho más
diminutos que la longitud de onda de la luz, y los ingenieros y los científicos
creen que el material se reducirá aún más, al menos hasta el final de la
década.
Pero, tarde
o temprano, la reducción de los circuitos hechos de este material se detendrá,
poniendo así fin a la era microelectrónica definida por la Ley de Moore (la observación que el cofundador de
Intel, Gordon Moore, hizo en el año 1965, y que establece que la cantidad de
transistores que podrán ser colocados en un chip de silicio se duplica en
intervalos regulares).
El avance de Stanford parece prometedor para
quienes creen que, una vez que la era del silicio llegue a su fin, el proceso
de reducción o achicamiento continuará, y permitirá a los diseñadores aumentar
todavía más la potencia y la capacidad de las computadoras en el futuro.
La demostración de Stanford se llevó a cabo durante
una sesión de la Conferencia Internacional de Circuitos de Estado Sólido, que
se celebra en San Francisco todos los años. Un estudiante de postgrado, Max
Shulaker, optó por una mano de madera, de tamaño humano, conectada a un simple
sistema de motor y engranajes colocado sobre un soporte improvisado. En el
escenario, accionó el interruptor y la mano se sacudió con fuerza.
Fue una demostración simple, pero el grupo de
investigación dijo que su meta era construir un microprocesador completo a
partir de nanotubos de carbono para confirmar el potencial del material.
Además de su pequeño tamaño, los nanotubos de
carbono utilizan mucho menos energía y se encienden más rápidamente que los
transistores de silicio de la actualidad.
"La conclusión es que se puede esperar un
orden de magnitud en el ahorro de energía a nivel del sistema", dijo
Subhasish Mitra, profesor asociado de ingeniería eléctrica en Stanford y
director de Robust Systems Group. Esto ofrece una gran expectativa en el
aumento efectivo de la duración de la batería en los dispositivos móviles de
consumo en el futuro, expresó.
Asimismo, se están estudiando otros nuevos
materiales y variaciones de transistores basados en el silicio con el fin de
ver si se reducirán a tamaños más pequeños. Intel, por ejemplo, el año último
comenzó a usar un transistor tridimensional llamado FinFET. Al girar el
dispositivo sobre su lateral, el fabricante de chips pudo llenar la superficie
de un chip con una mayor cantidad de transistores.
"No digo que no existan otras opciones",
señaló H.-S. Philip Wong, un profesor de ingeniería eléctrica de Stanford.
"Es sólo una cuestión de quién gana cuando se trata de reducir a
dimensiones muy, muy pequeñas".
El desafío de los nanotubos de carbono en su estado
tipo es que forman una gigante "bola de pelo" de moléculas
entrelazadas. Sin embargo, al cultivarlas químicamente en una superficie de
cuarzo, los investigadores pueden alinearlas estrechamente y en filas
espaciadas en forma regular. A continuación, las transfieren a una oblea de
silicio, donde utilizaron técnicas fotolitográficas convencionales para crear
los circuitos.
El obstáculo tecnológico ha sido el desarrollo de
circuitos fiables, incluso cuando un pequeño porcentaje de los cables está mal
alineado. El grupo de Stanford declaró que había perfeccionado una técnica de
circuito que hizo uso de la redundancia para evitar los cables imperfectamente
formados.
El Dr. Mitra dijo que "El 99,5 por ciento se
ve muy bien en una diapositiva de PowerPoint. Pero cuando se habla de una
cantidad de 10 mil millones, el 0,5 por ciento de 10 mil millones es un número
realmente grande, y eso lo arruina por completo".
Más allá de
la microelectrónica, los nanotubos de carbono son prometedores en aplicaciones
comerciales como las baterías recargables, los armazones de bicicleta, los
cascos de barcos, las células solares y los filtros de agua, según un artículo
publicado en la edición del 1 de febrero de la revista Science ..
Carlos Slim, irónico: "La Argentina es previsible, nunca se consiguen dólares"
El hombre más rico
del mundo criticó el cepo cambiario impuesto por el Secretario de Comercio,
Guillermo Moreno.
El magnate
millonario Carlos Slim ,
considerado el hombre más rico del mundo según la revista Forbes, se refirió de
manera irónica a la Argentina cuando fue consultado por las restricciones
cambiarias en el país y la previsibilidad regulatoria. "Me gusta
Argentina, un país magnífico. Es predecible: siempre se puede estar seguro de
que allá no se pueden conseguir dólares", señaló.
Es un año decisivo para el empresario ya que el
gobierno mexicano podría favorecer la competencia en las telecomunicaciones, lo
que terminaría con su monopolio; pero, a la vez, si el presidente Peña Nieto
toma esa decisión, deberá hacer lo mismo en el mercado de la televisión y eso
lo podría beneficiar.
En la entrevista concedida al Financial
Times y reproducida hoy en El Cronista , el
empresario, que empezó mal el 2013 ya que perdió cerca 2000 millones de euros
en Europa como consecuencia de una emisión de derechos de suscripción y la
caída del precio de las acciones de la compañía holandesa de telecomunicaciones
KPN, dijo que, en realidad y "por suerte" nunca tuvo la virtud de
convertir todo lo que toca en oro.
El junio del
año pasado, a poco de estatizada la petrolera YPF, la presidenta Cristina
Kirchner había celebrado como un logro de la gestión el ingreso de Slim a la
compañía (que se hizo con el 8,4% de las acciones que correspondían a la
familia Eskenazi). Pero, al poco tiempo, el hijo del magnate, dijo que el ingreso de su padre a YPF
era "circunstancial".
La AMIA hará una presentación ante la Corte Suprema por el acuerdo con Irán
El titular de la
mutual judía, Guillermo Borger, aseguró hoy que recurrirá a la Justicia tras la
aprobación del tratado con
Teherán en el
Congreso.
Luego de la
polémica aprobación del acuerdo con Irán para investigar el atentado contra la AMIA, el titular de la
mutual judía, Guillermo Borger, advirtió
esta mañana que recurrirán a la Justicia para "evitar que el memorándum de
entendimiento lleve a la nulidad de la causa".
En diálogo con el canal Todo Noticias, Borger
adelantó: "Veremos qué sucede con la mal llamada comisión de la verdad que
crea el memorando. Lo estamos llevando a todas las instancias judiciales
nacionales e internacionales, vamos a ir a la Corte de Justicia, nuestra
dedicación absoluta ahora va a ser para que este memorando que se acaba de
aprobar no lleve a la causa a la nulidad".
Luego, el titular de la AMIA afirmó que "en
más de diez horas de debate, nadie dio respuestas sobre qué hay detrás de todo
esto".
En declaraciones a Radio La Red, el diputado del
Frente Peronista, Gustavo Ferrari, dijo que la oposición también recurrirá a la
Justicia: "Nuestra propuesta es que esto continuará en el ámbito
judicial".
Con el apoyo de sus aliados, el kirchnerismo logró
en la madrugada de hoy la sanción de la ley que habilita al memorándum de
entendimiento firmado entre la Argentina e Irán con relación a la causa AMIA,
que investiga el atentado terrorista que mató a 85 personas en julio de 1994.
El Congreso
Judío Latinoamericano calificó hoy como "una vergüenza" y "una
agresión" la aprobación del proyecto enviado por el Ejecutivo. "Es
una vergüenza, no puedo aceptar una posición como ésta, es una agresión al
judaísmo, a los argentinos y sobre todo una ofensa para los familiares de las
víctimas del atentado a la AMIA", afirmó el presidente del Congreso, Jack
Terpins..
Suscribirse a:
Entradas (Atom)