El ministro ruso de
Exteriores visita al líder sirio en plena escalada bélica y dice que es
"consciente de su responsabilidad".
El ministro ruso de
Asuntos Exteriores, Serguei Lavrov, ha asegurado al presidente de Siria, Bachar el Asad,
que el objetivo de Moscú es que "los pueblos árabes vivan en paz y en
concordia", según informó la agencia estatal rusa de noticias, RIA
Novosti, con motivo de la visita oficial del ministro ruso a Damasco en medio
de una de las
ofensivas más duras contra la oposición en la ciudad de Homs, centro
de las revueltas que comenzaron hace casi un año en el país y tras haber
vetado una propuesta de resolución en la ONU que condenaba al régimen sirio.
"Los dirigentes de
los países deben ser conscientes de su parte de responsabilidad y ustedes son
conscientes de la suya", afirmó Lavrov durante su encuentro con El Asad,
citado por RIA. "Es de nuestro interés que los pueblos árabes vivan en paz
y concordia", añadió. El encuentro comenzó a las 11.30 de la mañana, según
informó la agencia siria Sana.
Lavrov llegó este martes
a Damasco acompañado del jefe del Servicio de Inteligencia Exterior ruso,
Mijail Fradkov, con el objetivo de reunirse con El Asad, según informó el
Ministerio de Exteriores ruso. La vista de produce tres días después de que
Rusia y China vetaran en el Consejo de Seguridad de la ONU una resolución árabe y occidental en
la que se pedía la renuncia de Al Asad.
Todos los ojos están
puestos en esta visita, por parte del único aliado que le queda a El Asad. El
ministro alemán de Asuntos Exteriores, Guido Westerwelle, declaró hoy que
espera de su colega ruso una advertencia clara a las autoridades de Siria para
que detengan la ola represora que está causando miles de muertos en la
población civil. "Rusia lleva mucha responsabilidad en su equipaje.
Esperamos de Rusia que transmita claros mensajes al régimen de Asad", dijo
Westerwelle, para quien el jefe de la diplomacia rusa debe dejar bien claro en
Damasco que "la violencia y la represión deben finalizar".
El objetivo del
viaje, según el
Ministerio ruso, es buscar "la vía más rápida para la estabilización de la
situación en Siria a través de la introducción inmediata de unas reformas
democráticas cuyo momento ya ha llegado". La televisión estatal siria ha
mostrado a cientos de personas concentradas en la autovía principal de Damasco
para dar la bienvenida Lavrov.
Moscú anunció la misión
diplomática el pasado sábado, un día antes del voto sobre la resolución, para
"intentar llegar a una rápida estabilización de la situación a través de
la rápida implementación de reformas democráticas". Rusia tiene en Siria
su única base naval. "Su principal objetivo es salvar algo de los
escombros de El Asad y contener la influencia de Occidente en su principal
aliado en el mundo árabe", comentó este domingo a Reuters Shashank Joshi,
del instituto de análisis militar Royal United Services Institute.
El secretario general de
la Liga Árabe,
Nabil Elaraby, ha declarado a Reuters que, durante una conversación que mantuvo
ayer lunes con Lavrov, éste le anunció que presentaría una propuesta a Damasco
en nombre del Gobierno ruso.
Mientras, el Consejo
Nacional Sirio, que reagrupa al grueso de la oposición en el exterior, y el
Ejército Sirio Libre, en el que se han alistado miles de militares desertores,
difundieron esta martes un comunicado conjunto en el que piden ayuda financiera
para luchar contra el régimen.
“Lanzamos un cálido
llamamiento a los hombres de negocios para que participen de manera directa y
eficaz a la financiación legítima de las operaciones de autodefensa y de
protección de áreas civiles llevadas a cabo por el ESL”, reza el texto.
La oposición siria está
siendo financiada por las monarquías del Golfo pérsico empezando por Arabia
Saudí y Catar. Su llamamiento de hoy está más bien dirigido a los hombres de
negocios sirios a los que les pide apoyo financiero a cambio, se supone, de no
pedirles cuentas cuando caiga el régimen del presidente El Asad. Es también una
manera de obligarles a tomar partido y tratar de acelerar el desmoronamiento
del régimen.
Por su parte, el Gobierno chino
está barajando la posibilidad de enviar un emisario a Oriente Próximo para
discutir la crisis en Siria, según ha indicado este martes su Ministerio de
Exteriores, en un intento por calmar las críticas tras su veto a la resolución
respaldada por la Liga Árabe en el Consejo de Seguridad de la ONU.
No hay comentarios:
Publicar un comentario